El objetivo principal de este tipo de terapia consiste en la mejora de la comunicación entre ambos miembros de la relación sentimental. Aunque cada caso es estudiado de forma particular y se aplican técnicas y herramientas terapéuticas diferentes según el origen y tipo del problema, es fundamental aprender a relativizar y controlar los impulsos y emociones para afrontar y resolver los conflictos de una manera más eficaz y eficiente.